Un hilo que recorre el espacio que se ocupa. Un tiempo que se puede visibilizar a través de dicho recorrido. Del simbolismo, de lo abstracto, bajarlo a la tierra, al terreno. Una actuación que pretende ser la unión de dichas maneras de aprehender el mundo. Esther Ferrer nos hace aprehender el mundo así, con sus actuaciones, con sus performance. Performance que son del aquí y del ahora: ‘Esther Ferrer: hilos de tiempo’.
El aquí y el ahora que se traduce como un espacio donde la interactuación de aquellos estamentos que nos atraviesan se presentan y que, a la vez, se debaten. Un debate que transcurre para todxs en nuestra cotidianidad.
Cotidianidad que nos lleva a tener miedos y Esther Ferrer nos los pone en común, en su performance, como un ente paralelo que se da en nuestras personas. Al igual que en el tren que recorre con el hilo, el cuerpo que se mide reflejado en la pared y alejado de los ideales impuestos, o los números primos.
Todos espacios que ocupamos como entes, como seres, como personas, y que llenamos, después, de significados para nosotrxs enfrente de lxs otros. Como Esther Ferrer, que primero es mujer feminista y luego artista.
Mujer feminista y artista que, influenciada por John Cage y Machado, realizó perfomances en un país donde la acción artística no se estilaba ya que el arte se entendía —aun se entiende en ciertos círculos— como palpable y perdurable en el tiempo y no como la conexión entre lo abstracto, lo simbólico y lo terrenal, el bajarlo a la tierra.
Josu Rekalde nos lleva a una conversación con Esther Ferrer para, en una hora, conocerla. Una conversación en el tren de John Cage, en su casa o en Bilbo donde conoceremos la importancia y simbolismo de la acción, y donde veremos que espacios, tiempos, ideas y conceptos interactúan danzando.
‘Esther Ferrer: hilos de tiempo’ es actuación como modo de llenar el espacio y el tiempo de significado.