Fluir. La fluidez de nuestros tiempos. Todo es efímero. Todo cambia porque todo se transforma. Por necesidad, por obligatoriedad. El término de durable ya no es permanente. Sara (Greta Fernández) ha nacido en esta época. Le ha tocado vivirla: de trabajo en trabajo, en un piso de protección oficial provisional, cuidando de su hijo, en una relación no amorosa con el padre de su hijo, visitando a su hermano pequeño en el orfanato e intentando crear una familia, la suya, desde el presente.
Presente marcado por el pasado cuando su padre fue enviado a la cárcel. Padre (Eduard Fernández) encontrado en el servicio de búsqueda de empleo por Sara y que le produce un rechazo. Rechazo que la lleva a encontrarse con él para tomar un café. Café en el que se enfrontarán los contrarios: Sara; buscando lo permanente en el mundo efímero, y Manuel, el padre, mostrando lo permanente desde lo efímero. Ella es ‘la hija de un ladrón’. Ella es el presente, lidiando con su pasado y enfrentando el futuro.
Sara es la vivencia de los márgenes barceloneses. Es la lucha diaria que enfronta los tiempos en los que vivimos. Unos tiempos donde lo único que tenemos por garantizado es lo efímero; la durabilidad muy determinada en el tiempo de nuestros derechos primarios. Un vivir en los márgenes que nos lleva, y queremos llevar, al centro pero que el centro nos repudia por la propia fuerza centrífuga que desprende.
Un centro caracterizado por la desestimación del pasado y la invisibilización del futuro. Un aquí y ahora que define más. Una incerteza, la del presente, que caracteriza la vida actual, rodeada de una soledad como ente común.
Belén Funes nos presenta a Sara, nos presenta a la hija de un ladrón. Ladrón que también vive en el presente; vive para el presente, sin importar lo que le precede y las consecuencias de lo precedido. Una historia de soledad en un mundo superpoblado. Una historia de los márgenes centrándose. Una historia centrípeta de los márgenes al centro, de la búsqueda de un lugar. Una historia de lidiar con la soledad.
Una historia de Manuel (Eduard Fernández), de Sara (Greta Fernández) y de su hermano. Historia del pasado, el presente y el futuro.